Bolu tiene una rica historia, que se remonta al período hitita (2000 a.C.-500 a.C.) y fue más tarde una ciudad importante en el Reino de Bitinia (279 a.C.-79 a.C.), habitada por diversas tribus como los Bebryces, Mariandynes, Koukones, Thyns y Paflagonios.
Durante la era romana, Bolu era conocida como Claudiopolis en honor al emperador Claudio, y más tarde, el nombre del amante divinizado póstumamente del emperador romano Adriano, Antinoo, fue añadido a las monedas de la ciudad. El emperador Theodosio II (408-450) convirtió a Bolu en la capital de una nueva provincia llamada Honorias, nombrada en honor a su hijo.
Bolu estuvo bajo el control bizantino y se llamaba Hadrianópolis, leal a los bizantinos, hasta que fue recapturada por los turcos nómadas en 1097 y renombrada Boli. En 1197, fue conquistada por las fuerzas invasoras del Sultanato seljúcida, y en 1325, fue conquistada por el Imperio otomano.
Hoy en día, Bolu es una ciudad con alrededor del 65% de cobertura forestal, lo que la convierte en un refugio para los árboles, el aire limpio y los paisajes naturales. Cuenta con bellezas naturales como Abant, Gölcük, Lago Sülüklü de Mudurnu, Kıbrıscık Karagöl y Aladağ Beşpınarlar, que seguramente encantarán a los amantes de la naturaleza. La cocina tradicional de Bolu, que ha sido mantenida viva por chefs renombrados de la provincia de Bolu, como Mengen, también es notable y ha ganado fama por sus sabores únicos y deliciosos.
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